Incrementa tus utilidades al convertirte en un empresario 2.0

¿De qué sirve aprender las mejores estrategias de marketing, ventas, producción y operación de un negocio si no estás dispuesto a monetizar tu crecimiento y multiplicar tu inversión de manera acelerada? El mercado se mueve rápidamente y es necesario que, como una nueva generación de empresarios, reacciones a su demanda de manera eficiente.

¿De qué te sirve tener una educación empresarial, por ejemplo, si no estás dispuesto a hacer lo necesario para llevar el conocimiento a la acción? En nuestra experiencia dentro de Coach Latinoamérica hemos detectado que de los más de 4 millones de Pymes que existen en México, sólo el 5% reporta ganancias anuales que rebasan el millón.

Si te estás preguntando cómo formar parte de la estadística y crecer tus ganancias hasta en 60% anualmente, tenemos una buena noticia para ti: ¡Puedes conseguirlo de manera acelerada con la orientación correcta! Pero de nada sirve sí estás dispuesto a pensar de manera diferente. Me refiero a revolucionar tu vieja forma de pensar y construir un pensamiento dinámico, que se camine de acuerdo a las tendencias del mercado y no se quede rezagado pensando que construir empresa significa no correr riesgos y mantener el negocio en un estado de supervivencia.

Existe una forma de pensar la empresa a partir de la razón propia de su existencia. Esta nueva mentalidad imperante es el business mindset y se trata de crear empresa con fundamentos estratégicos bien definidos, claros y precisos.

Un mindset empresarial 2.0 reconoce objetivos claros como el alineamiento de la operación del negocio a una meta clara y esta energía debe ser compartida por los miembros de la empresa.

Existen tres motores fundamentales que generan los empresarios 2.0 que sirven para generar un cambio de “chip” en la mente de los dueños de negocio y les permite poner en marcha un nuevo business mindest.

1. Ambición: este motor se caracteriza por el termómetro financiero, es decir, hasta dónde quieres llegar, qué tanto dinero quieres generar, cuánto valor quieres construir. La ambición es el impulso que te ayudará a tener éxito y entregar resultados concretos y de manera acelerada.
2. Toma de riesgos: ¿Cuánto estás dispuesto a invertir en el negocio? Regularmente estás son las decisiones que más le cuestan a uno como dueño. Tomar dinero que uno destinaría para su familia o para ciertos lujos y reinvertirlo en el negocio cuesta mucho trabajo. Siempre hay reticencias y dudas, pero si tu hambre por los riesgos es mayor que la aversión que puede generar el reinvertir, ya estás dando un primer paso para cambiar tu chip empresarial. El riesgo que se está dispuesto a asumir determina la velocidad con la que crecerá el negocio. Entre más te arriesgues, escalarás tu empresa con mayor rapidez, aun cuando las cosas no siempre salgan del todo bien. La pasión con la que un empresario 2.0 asume los riesgos distingue a un empresario agresivo de uno pasivo.
3. Visión: Entre más fija tengas la mirada en el objetivo, mayor será tu posibilidad de éxito. Como empresario es importante plantearse dónde estarás en cinco o diez años para evolucionar con mayor facilidad y alcanzar, sin pasar por desventuras innecesarias, la meta que te has propuesto. Los negocios que sí funcionan, tienen un plan, una estrategia, una visión definida y un modelo para expandirse.

Las diferencias entre un empresario que consigue cambiar su business mindset frente a otro que sólo asegura la supervivencia del negocio son notorias.

En Coach Latinoamérica contamos con programas comprobados de éxito que han ayudado a más de 8,500 empresarios a cambiar su mentalidad de supervivencia por un mindset 2.0 alineado a las necesidades exige su negocio para crecer. Arriésgate y define una identidad empresarial que te asegure millones.

Si requieres ayuda especializada para tu negocio, solicita una sesión de coaching de cortesía en donde te podremos apoyar y guiar por el camino correcto a tu empresa del millón.